Efeméride • 6 de octubre de 2025
Antonio Araluze, arquitecto y militante del primer nacionalismo vasco
Diputado provincial, burukide del Bizkai Buru Batzar y pieza clave en la reunificación de Aberri y Comunión.

El 6 de octubre de 1886 nació en Algorta (Getxo) Antonio Araluze, Kili-Kili. Estudió Arquitectura en Madrid y, tras titularse en 1912, recibió su primer gran encargo: el nuevo balneario Igeretxe, que combinaba casino y casa de baños en la playa de Ereaga.
Compaginó su labor profesional con una intensa actividad política y propagandística en favor del nacionalismo vasco, especialmente entre trabajadores de su gremio. Participó activamente en los batzokis de Algorta, Plentzia y Zalla, algunos de ellos levantados por él de manera altruista.
En 1920 formó parte de la minoría nacionalista en la Diputación de Bizkaia junto a figuras como Ramón Sota, Federico Zabala o José Ignacio Arana. Ese mismo año fue suspendido de su cargo por firmar un escrito con el grito “Gora Euzkadi Askatuta”.
Jugó un papel decisivo en la reunificación de Aberri y Comunión. El 23 de diciembre de 1930 fue elegido burukide del primer Bizkai Buru Batzar reorganizado, actuando como secretario. Durante la Guerra Civil trabajó como arquitecto, participó en la construcción de la batería de Matxitxako y fue testigo del robo de los planos del Cinturón de Hierro por Alejandro Goikoetxea. Tras la caída de Bilbao marchó a Valencia como consejero del Banco Bilbao, pero la derrota republicana lo obligó a exiliarse en Anglet durante cinco años.
De regreso a Euskadi, sufrió la incautación de sus bienes, la prohibición temporal para ejercer como arquitecto y la obligación de residir fuera de Bizkaia. Aun así, retomó su profesión y trabajó hasta los 85 años, cuando un accidente en una obra le provocó una hemiplejia.
En sus últimos años evocaba el recuerdo de un fugaz encuentro infantil con Sabino Arana y recitaba versos que había publicado en el diario Euzkadi bajo el seudónimo Kili-Kili.