Efeméride 19 de abril de 2023

Eustakio Mendizabal, “Txikia”: jefe y militante de ETA.

Tal día como hoy, el 19 de abril de 1973, el que fuera jefe de ETA, Eustakio Mendizabal, “Txikia”, fue asesinado por la policía en vísperas del Aberri Eguna.

Eustakio Mendizabal, “Txikia” Eustakio Mendizabal, “Txikia”

Nació en Itsasondo el 9 de octubre de 1944 y estudió como seminarista en los benedictinos de Lazkao. Salió del convento sin ordenarse y fue entonces cuando se integró en ETA. Al mismo tiempo, trabajó en una explotación agraria en las cercanías de Saint Palais (Behe Nafarroa).

En 1968 tuvo que marchar al exilio a Iparralde y al año siguiente se casó con Anabel Zubikarai, con quien  tuvo dos hijos, Matalás y Ekaitz.

Txikia, entregado y dedicado profundamente a la causa de ETA, tomó parte activa en la mayoría de sus acciones. Participó en el atraco a la Empresa Orbegozo, en el asalto al Banco de Bizkaia y en la operación de quema de los sindicatos franquistas de Irún, Rentería, Tolosa y Hernani, entre otros.

Tras las numerosas actuaciones en las que intervino, Mendizabal se convirtió en un destacado  objetivo de la policía. Un ejemplo de ello fue lo ocurrido el 9 de marzo de 1973, cuando Txikia y un compañero consiguieron escapar de una encerrona que el instituto armado les había tendido en Zumárraga. Entonces su organización le aconsejó que dejase Gipuzkoa y que se refugiase en Bizkaia, a lo que no accedió.

El 19 de abril de 1973, víspera del Aberri Eguna, Txikia llegó a la estación de Algorta donde le esperaba un compañero.  Allí la policía les tenía preparada una emboscada, por lo que ambos se separaron y emprendieron la huida. Mendizabal recibió un tiro en una pierna, y cuando intentaba robar un coche, un agente se le echó encima y le disparó en la cabeza. Murió minutos más tarde en el Hospital de Basurto.

Aunque el Gobierno español prohibió cualquier acto de homenaje, en Zokoa se celebró una misa multitudinaria en su recuerdo.

La muerte de Mendizabal, el hombre que mejor conciliaba los sectores “obrero” y “militar” de ETA, propició que al año siguiente se produjera su escisión.