Nota de prensa 7 de octubre de 2022

100 años de Emakume Abertzale Batza, el movimiento feminista que empoderó a las mujeres nacionalistas vascas

  • Desde sus inicios en 1922, EAB apostó por un nuevo modelo de sociedad a través de la propaganda a favor de la Patria, la educación, el euskera, los servicios de solidaridad y la asistencia social.
  • Una exposición con paneles, vitrinas y testimonios de históricas militantes de EAB muestra la labor y el compromiso de aquellas decididas mujeres.

El Centro Cultural Aiete de San Sebastián acogerá hasta el próximo 6 de noviembre la exposición “EAB 100 urte. Emakumeak Aberria eginez”, organizada por el Museo del Nacionalismo Vasco de Sabino Arana Fundazioa con motivo del centenario de la constitución de esta organización de mujeres nacionalistas vascas.

La muestra persigue visibilizar las actividades realizadas y las experiencias vividas a favor de Euskadi por aquellas mujeres que hace 100 años apostaron por un nuevo modelo de sociedad, impulsando múltiples iniciativas y trabajos.

En el acto de inauguración, Ion Gambra, director general de Derechos Humanos y Cultura Democrática de la Diputación Foral de Gipuzkoa, ha destacado que “cuando el debate sobre la participación política de las mujeres en Europa estaba en boga, un grupo de mujeres vascas reclamó su lugar en la sociedad y en la política. Fueron pioneras en ello y, a pesar de los obstáculos, gracias a su duro trabajo y a su compromiso total, dejaron una profunda huella en el camino hacia la igualdad en nuestro país. En consonancia con su activismo para garantizar el futuro del euskera, de la identidad vasca y de Euskal Herria, Emakume Abertzale Batza realizó una importante aportación en la construcción de una sociedad igualitaria”.

Por ello, el director general de Derechos Humanos y Cultura Democrática de la Diputación Foral de Gipuzkoa ha señalado que la labor desarrollada por aquellas pioneras en nuestro territorio y en nuestro pueblo es un “modelo” para los hombres y mujeres de hoy en día, de manera especial “para las generaciones futuras”.

Por su parte, Mireia Zarate, presidenta de Sabino Arana Fundazioa, ha recordado que, en el ámbito peninsular “EAB  fue la primera organización política femenina nacionalista” y que ha sido “uno de los movimientos más dinámicos y sociales de Euskadi”. “EAB consideró de gran importancia la formación de la mujer, organizó diferentes cursos, conferencias y congresos, promovió la formación de organizaciones como las Gexozaiñak, reivindicó la formación profesional en el ámbito de la Asistencia Social…”, ha afirmado.

 

Durante la visita guiada, las comisarias de la exposición, Karmele Perez Urraza, Begoña Bilbao Bilbao y Gurutze Ezkurdia Arteaga, profesoras de la UPV-EHU (Facultad de Educación-Grupo de investigación Garaian),  han subrayado que la exposición está concebida como un homenaje a la labor patriótica llevada a cabo por EAB, “una labor que fue desde la propaganda política a la educación, los servicios de solidaridad, etc.”.

“Partiendo de la beneficencia, llevaron a cabo un compromiso a favor del euskera tanto en las escuelas infantiles vascas como en la formación de las mujeres”, han añadido.

Durante el recorrido a la exposición, las comisarias han explicado que esta se compone de vitrinas y 24 paneles, divididos en seis grandes bloques temáticos. En dichos bloques se recogen tanto la labor como el pensamiento desarrollado por la asociación durante todo su recorrido histórico: 1) Inicios de EAB 2) Florecimiento de EAB; 3) Doctrina “Jaungoikoa eta Lagi Zarra” (JEL); 4) EAB y la educación; 5) EAB y la asistencia social y 6) EAB durante la guerra y el exilio.

  1. Inicios de EAB

En abril de 1922 se dieron los primeros pasos para crear Emakume Abertzale Batza, tomando como referencia y modelo la asociación de mujeres nacionalistas irlandesas Cumann na mBan. Un mes después, el 7 de mayo, unas cien mujeres se reunieron y decidieron crear la asociación como tal. Además de nombrar una directiva, se formularon los objetivos principales de EAB: colaborar con la difusión de las ideas nacionalistas a través de la beneficencia y la propaganda, y profundizar en uso y promover el conocimiento del euskera y la cultura vasca. Este apartado se completa con las biografías de las primeras directivas de la asociación.

  1. Florecimiento de EAB

El periodo más fértil de EAB fue el que abarcó los años  1931-36, dado que se produce en esas fechas lo que podríamos llamar “florecimiento” de la asociación, y unido a ello su extensión al resto de los herrialdes. Se crearon grupos de EAB en la mayor parte de los pueblos de Euskal Herria, y para 1936 eran más de 28.000 las emakumes afiliadas. El derecho a voto se consiguió en el mismo periodo en que muchas mujeres de EAB actuaban como mitineras.

  1. Doctrina “Jaungoikoa eta Lagi Zarra”(JEL)

El pensamiento de  EAB se basaba en el lema de Sabino Arana "Jaun-Goikoa Eta Lagi-Zarra" (Dios y Fueros). Con una fuerte base en la sociedad vasca tradicional y unida estrechamente a la imagen de la ama de casa, las integrantes de EAB salieron de su espacio habitual en el hogar y trabajaron  en el ámbito de la solidaridad, en el de la enseñanza y en la transmisión cultural. Con el tiempo extendieron su labor al ámbito social y político, siempre bajo la doctrina JEL.

  1. EAB y la educación

EAB desde sus inicios dio a conocer que una de sus labores principales era la de llevar a cabo la difusión del nacionalismo, junto con la labor educativa, las labores de solidaridad y la ayuda social. Euzko Ikastola Batza se organizó para llevar a cabo un proyecto educativo alternativo, renovador en el ámbito lingüístico, en sus objetivos y en la pedagogía. EAB también llevó a cabo una gran labor en la educación informal tanto con niñas y niños y personas adultas. Con objeto de preparar ponentes y mitineras, por ejemplo, se organizaban clases de oratoria.

  1. EAB y la asistencia social

Los precedentes de EAB, que posteriormente integró en su estructura, fueron Euzkel Jantzitegia o Ropero Vasco, que fue creado en 1908 con vocación benéfica, y Euzkotarren Aldezko Jel-bazkuna, creada para ayudar a los jóvenes obligados, en los años 20, a partir al frente de África y a sus familias. La Comisión de Asistencia Social se creó bajo la dirección de Teresa Azkue. EAB además de ofrecer charlas de carácter político-social, organizó el congreso de Asistencia Social. Su objetivo consistía en la creación de una Escuela de Asistencia Social. También ofrecían cursos de formación de enfermeras a partir de 1932.

  1. EAB durante la guerra y el exilio

En tiempo de guerra, las emakumes destacaron por su actividad. Se repartieron el trabajo y confeccionaban ropa para los gudaris y recogían mantas y prendas de abrigo. La labor de retaguardia de EAB resultó imprescindible, llegando a sustituir incluso a los hombres en algunas labores. Se constituyó Euzko Gexozañen Batza y su labor en el frente y los hospitales resultó imprescindible. Cuando fue necesario se acompañó a las niñas y los niños al exilio y se ofreció refugio a los gudaris.

Las emakumes también fueron agentes activos en labores de espionaje, llegando a ser muy conocidas las integrantes de la Red Álava. En el exilio, fue especialmente relevante la acción de EAB poniendo en contacto labor de EAB  poniendo en contacto la dirección exiliada del nacionalismo con la resistencia antifranquista en el Interior, que actuaba tanto en las cárceles como en la calle.

El recorrido culmina con un vídeo que recoge testimonios de algunas de aquellas históricas mujeres.

Entre las autoridades que han asistido a la inauguración de “EAB 100 urte. Emakumeak Aberria eginez” se encontraban Joseba Egibar, presidente del GBB de EAJ-PNV; Bakartxo Tejeria, presidenta del Parlamento Vasco; Arantxa Tapia, consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente del Gobierno Vasco; Beatriz Artolazabal, consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales del Gobierno Vasco, Beatriz Artolazabal; Miren Elgarresta, directora de Emakunde; Xabier Ezeizabarrena, presidente de las JJ.GG. de Gipuzkoa, las parlamentarias navarras María Solana y Blanca Regúlez, etc.

Tras su paso por San Sebastián, está previsto que la muestra, de carácter itinerante, pueda ser contemplada en el resto de las capitales vascas y en diferentes municipios de Euskadi.